3 feb 2010

Office 2010

¿Será una actualización que valga la pena adquirir o, tal como Office 2007, será una que se pueda pasar por alto?Es una pregunta que se hacen sin duda muchos actuales usuarios de Office y más de algún ejecutivo de Microsoft.

Office 2010 puede verse como análoga a Windows 7 por representar la última oportunidad de Microsoft de convencer a quienes se preguntan si ha oído las quejas de los usuarios. Tal como Windows Vista, Office 2007 fue adoptada por pocas personas. Los cambios en la interfaz en Office 2007 no parecieron ni radicales ni gratuitos. Y, para muchos, los recursos adicionales de esta versión tampoco fueron razón suficiente como para salir de Office 2003, su antecesor.

Office 2010, tal como Windows 7, es algo nuevo. De hecho, Microsoft se inspiró en el largo programa de Windows 7 cuando el año pasado puso la versión beta (de prueba) de Office 2010 a disposición del público. Hasta ahora, más de dos millones de personas han descargado Office 2010, según Microsoft, y la respuesta ha sido alentadora. Office 2010 es estable, rápido y está cargado de innovaciones beneficiosas. La única pregunta que queda es si esas innovaciones bastan para hacer que usted se interese también por esta actualización.